miércoles, 15 de enero de 2014

LBT


Lbt es la clase de los miércoles, una sesión de ejercicios liderada por Rebecca, una belleza nórdica de musculatura delicada pero bien definida, que no cuenta en su cuerpo con un solo gramo de grasa.

Cual ángel de las tinieblas, nos lleva al infierno durante los 45 minutos que dura su clase, torturándonos con repeticiones interminables de ejercicios.

Donde Zumba era la diversión, LBT es el sufrimiento. Solo hay un pensamiento en la mente del participante: por Dios que se acabe este Calvario! Al concluir todos nos alegramos de haber sobrevivido a la sesión, aunque hayamos perdido la dignidad a mitad de camino.

LBT son las iniciales de Legs, Bums and Tums y los ejercicios se centran en fortalecer estas zonas. Es perfecta para bellezas latinas con desproporcionados traseros, aunque cuenta con muchas locales decididas a quitarse un “inch” o dos del contorno de la cintura. Entre unas y otras la clase esta hasta arriba, amén de un par de maromos que no sabemos a qué van, aunque lo intuimos.

Y como comprenderéis, la que suscribe no tiene más remedio que asistir. Si hubiera alguna duda sobre si la clase es adecuada para mí, mis hijos la despejaron hará un tiempo.

Aviso que el contenido de las próximas líneas podrá herir la sensibilidad del lector. Si decidís continuar, será bajo vuestra responsabilidad:

Estaba yo vistiéndome una mañana, cuando a mi espalda, mis hijos, sin pretender hundirme en la miseria, comentaron:

-Wow mami, you’ve got a big bottom!
-And it moves when you walk!

No lo traduzco por amor propio. Cada cual que se busque la vida.

Mi adorable descendencia fue tan gráfica que desde ese día supe que mi vida estaría sometida a la tortura sádica de Rebecca.

Y es que con unos niños como los míos, yo no necesito personal trainer! 

No hay comentarios:

Publicar un comentario