lunes, 18 de noviembre de 2013

L'amour

No se como contaros esta historia, principalmente porque hay algunas partes que desconozco. Pero creo que merece la pena que sepais lo que yo se.

Todos conocéis a la pequeña H, la amiguita francesa de G, una preciosa niña con el pelo muy rubio y muy largo y los ojitos verdes. G y B se conocen desde que nacieron, y ya hace 5 años y medio de eso.

Como cualquier niña de su edad, a H le gusta jugar a los papas y a las mamas, fantasear cuantos bebes tendrá de mayor y esas historias. Normalmente a G le ha venido tocando ser el papa.

La verdad, no tengo ni idea de si, cuando se ven, juegan mucho juntos. Siempre me ha parecido que G iba bastante a su bola, pasando de jugar a cosas de niñas y centrándose en sus coches, sus aviones y su lego, en ese orden cronológico.

Pero algo me debo estar perdiendo, porque hará un mes me dijo:

-Mami, H y yo somos especiales.
-Ahhh. Y tu hermana y W (el hermanito de H) también lo son?
-No.
-Y porque sois especiales?

Y ya no recuerdo bien si la respuesta fue que eran super heroes o tenían super poderes. Pero era algo bastante elaborado y yo no le estaba prestando demasiada atencion.  

El sabado fuimos a cenar con los papas de H, y para variar, y supongo que para aburrir miserablemente a nuestros maridos, nos pusimos al día de los progresos de nuestros retoños. En un momento de la conversación la mama de H me comento con cierta guasa:

-Por cierto, siento tener que daros la noticia, pero parece que H en el campamento de finales de octubre conoció a un chico un poco mayor, francés, y muy guapo, que lo primero que me dijo al verme, es que de mayor se quería casar con H.

Y con cierta pena le conte lo que habíamos hablado G y yo unas semanas antes. La verdad que aunque son chorradas, una mama siempre teme que a su hijo le rompan el corazón, por muy chiquitin que sea (el corazón, no el niño). Pero... c'est la vie! Y para consolarme pensé que siempre podrá H cambiar de opinión y mientras tanto G igual ni se habrá enterado.

Como menospreciamos las mamas las capacidad de nuestros pequeños, y como nos preocupamos y sufrimos, sin pensar si quiera que tu hijo no solo se entera de las cosas sino que además ha evaluado la situación, y la ha redirigido donde el quería, utilizando una de sus principales virtudes: la dialéctica.

Os explico, 24 horas después de nuestra cena, y mientras paseaban, H decidio poner al dia a su desactualizada mama sobre su planes:

-Mami, sabes, voy a tener tres bebes. Comprare una sillita doble para llevar dos y otra individual para llevar al tercero.
-Pero H, eso no es muy practico, tu solo podras empujar una. No es mejor llevar una triple?
-No, G empujara la otra.
-G???
-Pero, tu no ibas a casarte con Paul?

H se para, suspira y pone la típica cara de mi mama no se entera de nada, esa en la que sueles dirigir la mirada hacia arriba.

-Mami... yo no me puedo casar con Paul.
-Y porque motivo?
-Porque G y yo SOMOS ESPECIALES!!!!

Y aqui estoy yo, intentando indagar en esta historia, pero G no me quiere contar mas, porque dice que es un secreto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario